A mi mejor amigo Ckozus le desagrada en demasía mi perra guadalupe. Siempre que viene de visita vuelve a quejarse del natural hedor que expele la raza. Como Ckozus es de espíritu inquieto, se puso a buscar pretexto científico en la web que justifique su negativo afecto hacia los animales, y en particular, a mi pobre guada.
Me mando un link, el cual leí atentamente. Me parece interesante, nada con rigor científico, mas que una lejana alusión a un libro de no se quien poronga, de donde el autor del articulo basa todas las conjeturas, pero como yo no me atrevería a desmentir algo de lo cual no se nada, como es la biología y el medio ambiente, lo tomo como un estudio serio, y posiblemente científicamente valido. Paso el link para el que quiera leerlo.
http://www.neoteo.com/mascotas-ecologicamente-incorrectas.neo
Bueno, el tema de este articulo es el siguiente:
las mascotas, esos adorables animalitos que tenemos en casa y de los que jamas sospecharíamos que pueden tener algo que ver con el calentamiento global, tienen una huella mucho más importante de lo que puedes imaginar. De hecho, la huella ecológica de nuestros animales de compañía pueden incluso ser mayor que la del más voraz de los automóviles. El mejor amigo del hombre resulta, además, uno de los peores enemigos del planeta, en opinión de estos dos autores del libro “Hora de comerse al perro”.
La variable en cuestión, lo que los especialistas en ecología denominan huella de carbono y que seria algo así como la totalidad del volumen de gases de efecto invernadero emitidos -por efecto directo o indirecto- por un individuo, organización, evento o producto. Como se toma en cuenta tanto el efecto directo, como también el indirecto, tanto los pedos que se tira mi perra, hasta el proceso de manufacturación del alimento que ingiere están contemplados en el total. Entonces dice el autor parafraseando al del libro:
"Imaginemos un país rico, con 400 millones de habitantes, en el que cada hogar tiene en promedio 4 habitantes y una mascota. Eso hace 100 millones de mascotas que hay que alimentar. Si Robert y Brenda han hecho bien sus cálculos, con los recursos destinados a mantener esa cantidad de animales podríamos alimentar a mas de 100 millones de personas de los países más pobres. Si la pobreza del tercer mundo no te conmueve, piensa que mantener esos animales supone el mismo daño ecológico que unos 200 millones de coches medianos humeando por las calles." Como ven, no tan solo de huella de carbono estamos hablando.
Por supuesto todos tenemos una huella de carbono, pero por alguna razón, que no supe contemplar bien por que, la de los perritos y gatitos que están al pedo en la casa son mucho mayores que la tan necesaria 4X4 que tan bien me hace quedar frente a los muchachos y las chicas los fin de semanas en la puerta del boliche.
Al terminar la lectura me entro un poco de angustia, y es que sabemos que hay leyes que protegen a los animales, pero, y si esto no alcanza?. Leí en algún lado que en el calentamiento global, mal llamado, pues ultimamente se lo llamo simplemente cambio climático, el hombre poco influye. Si el hombre en su voraz necesidad de consumo, influye muy poco en el calentamiento, me cuesta tanto creer que mi guadalupe, con sus escasas necesidades mas que la de alimento refugio y cariño pueda agravar aun mas la situación.
Pero bueno... hay males, y males necesarios, lo triste y alarmante son los desplazamientos de estos rótulos en los objetos, y sus consideraciones por el hombre en esta gran sociedad capitalista.
Ya lejos quedaron los tiempos en las que devolver el amor que se daba era lo que contaba.
Por mi parte, si alguna vez debo comer a mi guadalupe para salvar el estilo de vida de no se quien, solo pediré una noche mas de incansable lectura al lado del hogar, solo para darme el gusto de jugar otra vez con mis pies descalzos en los rollizos pliegues de mi mejor compañera.
Esta navidad la pasamos solos, es decir, mi viejo mi vieja mi abuelo y yo, como ya viene ocurriendo en los ultimos años. Le dije a mi vieja:
-Che:- Que hace silvina (mi prima hermana), con quien pasa el año nievo?.
-No se... creo que con Dante (su marido) y las tres niñas.
-Por que no la hablas y pasamos juntos el año nuevo...
-bueno... ya la hablo.
Silvina, como es bien guapa, llego temprano con las niñas, limpio la casa, preparo la comida, y yo jugue con las tres salvajes que tanto me hacen reir.
Como a las ocho llego Dante, recien entregaba el tacho, asi que el del siguiente turno lo trajo hasta casa.
Cuando llego el esperado nuevo año, comenzaron los fuegos artificiales, en mi barrio son varios los que queman el sueldo en pirotecnia para despedir con bronca el año que pasa y la verdad yo soy un usufructuario de su bronca, cual vil parasito.
Cuando brindamos Dante abrazo fuertemente a mi viejo y lloro largo rato. Las niñas se me colgaron para preguntarme por que su padre lloraba, no supe que decirles... solo me salio una frase que no entendieron, pero que cuando sean mas grandes resignificaran si es que el momento queda en sus memorias. Les Dije, Bueno... su padre esta contento, llora de feliz que esta... es un derecho que se gana con los años.
En fin de año todos brindamos por un año de exito, pero en el frenesi del momento olvidamos que de las penurias de la supervivencia, del amargo sabor de los fracasos pasajeros, solemos escarbar y encontrar las causas que dieron como consecuencia el estar ahora, asi... Apostando a un año de exito!!!
Que Dante tenga un gran año, que la salud y el exito lo acompañen por muchos mas. Es mi deseo tambien para todos ustedes. Un fuerte abrazo!!!!!!